El shiatsu puede y debe ir más allá de la descontractura muscular, de la relajación, o del tratamiento estructural u orgánico.

Nuestros desequilibrios físicos son de origen emocional en la mayor parte. El Shiatsu Emocional es una herramienta eficaz para profundizar en los sentimientos bloqueados o en aquellas experiencias que han dejado rastro en nuestro cuerpo físico.

El Shiatsu y las emociones bloqueadas

Las emociones son los pensamientos primarios aumentados y potenciados por el pensamiento negativo humano. De las emociones y de los sentimientos no podemos deshacernos porque nos cenvertiríamos en máquinas o robots. Se trata de poder vivir con nuestras emociones y experiencias sin que nos hagan daño o nos priven de la salud y de nuestra autonomía.

El sistema personal de Shiatsu emocional desarrollado por Emilio Estivill es sencillo y fácil de aplicar. Se trata de incorporar la respiración consciente de boca y la presión especializada de Shiatsu sobre los puntos ashi (puntos de dolor).

Al respirar los puntos de dolor que presionamos es la llave de este sistema para abrir la puerta a las emociones bloqueadas. Durante la sesión se suele producir una catarsis o purgación de sentimientos almacenados o encapsulados en los tejidos musculares que presionamos. Es la memoria celular experimentada en kinesiología.

Ciclo de una emoción

Una emoción es una energía que entra en nosotros, al igual que cuando tomamos aire al respirar. Para completar el ciclo necesitamos vivirla y devolver parte de dicha energía al exterior como cuando expiramos. Si no la devolvemos al exterior nos empezaremos a cargar internamente de presión y tendremos que emplear energías para contenerla.

La vía natural para devolver dicha energía al exterior es mediante su expresión. Una de las partes más importantes de este ciclo es el aprendizaje que obtenemos. Por ejemplo, si sentimos rabia nos podría indicar que nos están invadiendo nuestros límites, si hacemos un buen uso, nos empujará a marcar los límites adecuados y hacerlos respetar para que no se vuelva a repetir la situación que lo provocó.

Podemos usar diversos mecanismos defensivos de control o resistencias para no completar dicho ciclo y para ello usamos nuestros meridianos como medios para conseguirlo.

Una resistencia puede ser la desconexión de la situación, no queremos que nos toque, que nos emocione, que nos produzca un cambio interior y optamos por huir de ella. Para tal fin podemos usar el meridiano del intestino grueso o en el caso de un shock el intestino delgado.

Otra resistencia puede ser el no reconocer y aceptar la emoción como propia y darle un espacio para vivirla. Aquí la respiración juega un papel muy importante, ya que podemos usarla para no sentir plenamente. Si no queremos aceptar dicha emoción, bloqueamos la respiración o la hacemos muy superficial, así conseguiremos que la emoción pierda intensidad, pero también información útil de lo que está pasando. A tal fin podemos usar los meridianos de hígado, vesícula y pulmón.

Si nos reprimimos o resistimos a expresar la emoción, podemos usar los meridianos del corazón, maestro corazón, intestino delgado, triple calentador, intestino grueso, hígado, vesícula, que afectan a los diferentes canales que tenemos para expresar las emociones: el cuerpo, la voz y la mirada.

Finalmente nos quedaría aprender e integrar la experiencia. Aquí de nuevo podemos resistirnos e ignorar la lección, usando nuestros meridianos de corazón e intestino delgado hasta que no lo integremos dentro de nosotros, transformando nuestra forma de pensar y poniendo los medios adecuados y coherentes mediante nuestras acciones.

Estas resistencias las podemos usar de manera puntual, adaptándonos adecuadamente a una determinada situación o de manera crónica, constante y predecible. Esta situación de cronicidad es una de las causas que producen desequilibrios en determinados meridianos.

Las siete pasiones

Cuando las emociones las padecemos durante mucho tiempo, afectarán profundamente a los órganos, bloqueando su función y desarrollando patología grave y un umbral de dolor invalidante.

Las 7 pasiones son más graves que las otras emociones porque las sufrimos durante largo tiempo y pueden deteriorar más profundamente nuestra salud.

No es lo mismo enfriarse una noche por descuido que vivir permanentemente en una casa húmeda, fría y oscura. No es lo mismo padecer una situación de estrés momentánea en el trabajo que trabajar estresado y en una tensión a límite diario.

Las 7 pasiones tradicionalmente descritas por la M.T.C. (Medicina Tradicional China) son: la ira, la frustración y el estrés, todas ellas del hígado; la preocupación excesiva, que afecta al bazo; la tristeza, que ataca al pulmón; el miedo, que paraliza el riñón; y la euforia, que afecta al corazón y desequilibra la mente.

Según la M.T.C. toda enfermedad se debe a la desarmonía entre el espíritu y la materia, entre lo físico y lo espiritual.

5 Elementos – 5 Órganos – 5 Vísceras – 5 Cualidades

Según la M.T.C. hay una emoción principal asociada a cada unos de los 5 elementos. Así la Tierra se asocia con la inseguridad, el Metal con la tristeza, el Agua con el miedo, la Madera con la rabia y el Fuego con la alegría.

Un desequilibrio se puede manifestar como un exceso o como una ausencia de dicha emoción. Por ejemplo, el estar constantemente enfadado o rabioso, o por el contrario no sentir nunca rabia ante ninguna situación. En cualquiera de estos casos, trabajando los meridianos de la madera (hígado-vesícula) dejaría de manifestarse dicho problema.

La realidad es mucho más compleja, dinámica y cambiante. Todos los elementos influyen en todos, hay interacciones entre distintas emociones, determinados mecanismos de control que influyen en todas las emociones, influencias externas, el cómo tenemos desarrollada nuestra sensibilidad y nuestra conciencia corporal o emocional, etc.

Como una piel de cebolla, progresivamente, se trata de ir separando capas endurecidas por los años de excesivo control o represión de los sentimientos. 

Cuando los órganos funcionan correctamente, desarrollan sus cualidades y virtudes positivas a nivel anímico.

El corazón y el fuego en equilibrio da serenidad, fortaleza, la mirada y el rostro serenos, la persona es intuitiva y certera en sus juicios. Su mente y su espíritu está equilibrado.

Cuando el bazo está en armonía y funciona correctamente, la persona es lúcida, inteligente, decidida, y su afectividad y relaciones muy positivas.

Cuando el pulmón funciona correctamente, los reflejos y el instinto de la persona están despiertos. Manifiesta gran energía y fuerza. Su conexión espiritual le hace progresar y evolucionar a nivel humano.

Cuando el funcionamiento del riñón es el adecuado, la voluntad para vivir se manifiesta en longevidad y buena salud. Energía desbordante y a la vez calmada.

Cuando el hígado está en armonía y en funcionamiento óptimo, la persona es valiente, noble, trabajadora, incansable y justa con todos.

Nuestra vida tiene que tener coherencia en todos los ámbitos. Se relacionan centros energéticos con los 5 elementos y con el cuerpo humano.

1. El agua, riñón y vejiga se relacionan con la fuente de la vida, lo genético; y representan en la vida lo instintivo, lo físico. “Lo que somos en esencia.”
2. La tierra, bazo, páncreas y estómago se corresponden con el centro del cuerpo humano, donde reside el equilibrio, donde se realiza la asimilación de nutrientes. “Representa lo que aprendemos, nuestro grado de interrelación con los demás.”
3. La madera, hígado y vesícula biliar representan lo que hacemos en esta vida, cómo nos adaptamos a las circunstancias, cómo nos enfrentamos a las dificultades. Es nuestro proyecto de vida.
4. El fuego, corazón, intestino delgado, pericardio y Triple calentador representan lo que sentimos, a quién y qué amamos. Todas las emociones pasan por el corazón, y la intensidad en cómo se vivan esas emociones afectarán en mayor o menor medida a este órgano.
5. El aire-metal, pulmón e intestino grueso representan lo que creemos, lo que nos inspira y a lo que aspiramos. Representa la conexión más elevada con nuestro ser superior.

En resumen

Si lo que creemos está en conexión con lo que pensamos, con lo que decimos, con lo que sentimos, con nuestro proyecto de vida, con quien nos relacionamos y, finalmente, a lo que somos, aceptándolo totalmente; nuestra vida será coherente, llena de fuerza y feliz. Sin enfermedades, ni desequilibrio.

La unión entre la creencia, pensamiento, afecto y relaciones nos dará el auténtico equilibrio.

La medicina china y sus emociones

El riñón y el miedo

El riñón, según la M.T.C. es el “El Cielo Anterior” o lo que es lo mismo, la carga genética de nuestros padres, la energía Yin y Yang ancestrales, la evolución y maduración uterina del feto. Los riñones son los primeros órganos formados en la evolución fetal.

Las zonas reflejas del bloqueo de riñón son por orden de importancia: los tobillos, la columna, el cuello, los genitales, la dentición, los huesos y el cerebro.

Los sistemas más afectados por insuficiencia de la energía renal son: sistema óseo, sistema linfático, urinario, sanguíneo, nervioso, hepático y cardiorrespiratorio.

Las personas con el riñón bloqueado por el miedo sienten fortísimos dolores en el tobillo al ser estimulados los puntos de riñón. 

El hígado, la rabia, la frustración y el estrés

El hígado es el filtro de nuestra sangre y la reserva necesaria en caso de peligro. Maestro de la sangre, de los movimientos de la energía, de los tendones y de los ligamentos.

El hígado es la coraza con la que nos enfrentamos al día a día, a las dificultades y obstáculos que nos plantea la vida. Las situaciones que nos producen tensión, enfrentamiento, enfado, o frustración van a producir sobre nuestro organismo el mismo resultado; estancamiento de la sangre en el hígado.

Si la situación “estresante” es momentánea, se puede liberar con ejercicio físico, con gritos, llanto, o inhibirla directamente con otra situación de signo contrario que nos produzca placer o hilaridad. Si, por el contrario, la situación no se libera o se mantiene durante mucho tiempo, la sangre extasiada en el hígado se calienta, se deshidrata, se hace más viscosa y tóxica.

Ese estado de estancamiento tiene muchas consecuencias. A nivel emocional: irritabilidad, nerviosismo, calor interno, ansiedad, … A nivel físico, el corazón tendrá que bombear más sangre para poder oxigenar, taquicardia, arritmia, sudoración excesiva, insomnio, migrañas, cansancio, contracturas, calambres, tics nerviosos, alergias, asma, mala digestión, tos seca, infartos, diabetes, vértigos, quistes, tumores, artrosis, artritis, impotencia, depresión, …

En cuanto a masaje, la presión debería hacer explotar el fuego acumulado en forma de gritos o llanto. Eso sería el remedio ideal. Llegar a la catarsis. Pero la respiración del dolor ya es un primer paso si no se consigue la primera vez. Y cuando el fuego se convierta en calor, el dolor será más soportable, y los puntos empezarán a doler menos.

El bazo y la preocupación

Maestro de la digestión, de la metabolización de los alimentos, de los músculos y de la contención de la sangre. Su misión es destruir la sangre vieja.

Dicen los acupuntores que el bazo le afectan la preocupación excesiva o el exceso de pensamiento, o de esfuerzo intelectual.

El bazo-estómago estará relacionando afecto y placer con alimentarse y solamente nos alimentamos cuando comer supone un acto placentero y feliz. Es decir, que el buen estado de nuestro bazo-estómago nos muestra un poco la relación que tenemos con lo demás.

¿Cómo se van a manifestar estas malas digestiones?

No nos esteremos nutriendo, la sangre será de baja calidad en nutrientes. Nuestros músculos estarán mal nutridos. Decaerá el tono muscular. Si los músculos no dan soporte al sistema esquelético, los huesos no se sostendrán. Se producirán hernias, mamas caídas, vientres flácidos, cansancio, astenia muscular, síndrome de fatiga crónica. El bazo-páncreas se atrofiará debido al aumento de fermentos y tóxicos no metabolizados. La sangre se convertirá en un líquido tóxico. El organismo no reconocerá esta sangre como suya e intentará destruirla fagocitándola. Se producirán estados de alergia inmunitaria, asma alérgica, artritis, fibromialgias, hernias discales, infecciones, candidiasis, sinusitis, rinitis, obesidad, bulimias, reumatismo articular. A nivel emocional: obsesiones, falta de claridad mental, neurosis y una desconfianza vital en los otros o una dependencia de quedar bien y de ser aceptados continuamente por los otros sin saber decir que no por miedo a perder el afecto.

Cuando el bazo hiperfunciona, puede destruir más sangre que la que debe eliminar por vieja y tendremos una enfermedad Yang que traduce en cáncer o leucemia, pero lo más normal es una hipofunción o inhibición del bazo en su función. La enfermedad será de naturaleza Yin o de vacío y la consecuencia inmediata será la intoxicación sanguínea, la viscosidad o la mucosidad almacenada en el pulmón, provocando el síndrome de obstrucción de la energía-sangre o reumatismo articular. Con esta problemática, le persona se puede preocupar porque no entiende, no recuerda, no ve claro, se angustia y se siente perdida en un mar de dudas. Puede desconfiar de todo y de todos. Tiende a buscar compensaciones alimentarias de tipo dulce para conseguir energía extra que a la larga solo le perjudicará más porque al dulce atacará al bazo-páncreas.

El bazo bloqueado por problemas emocionales, dietéticos o climáticos o los tres a la vez actuando al mismo tiempo llega a afectar a otros órganos: al pulmón, acumulando mucosidad en las vías respiratorias y provocando rinitis, sinusitis, alergias, tos o constipados de repetición. Atacará al hígado sobrecargando la función de drenaje de este órgano. Se acumulará tanta sangre tóxica que el hígado se saturará y provocará malas digestiones, reglas excesivas, anemias, problemas musculares por mala nutrición de los músculos, problemas sexuales, cándidas, depresión, artritis, artrosis, dolores de cabeza, pólipos, quistes, tumores uterinos, mamas poliquísticas, …

El pulmón

Maestro de la respiración, de la piel, del instinto, del Espíritu, de la serenidad, de la intuición y el equilibrio. Capta el aire y refresca la sangre. La M.T.C. dice que al pulmón le afecta la tristeza.

¿Por qué hay tanta gente triste?

La razón externa: la contaminación, los espacios cerrados mal ventilados o ventilados mecánicamente, el tabaco y la combustión de hidrocarburos fósiles.

Una razón de tipo interno y que afectará en mayor medida más a las mujeres que a los hombres: en nuestra sociedad está muy mal visto que las mujeres griten, insulten, digan tacos o manifiesten el enfado o la disconformidad. Y, en cambio, les está permitido expresar la tristeza. Cuando una mujer siente rabia, frustración o disconformidad y no lo expresa, en lugar de permitirse estar airada o sencillamente enfadada, se siente triste. Hay una contaminación de sentimientos y la persona se siente confusa. No entiende lo que pasa. Pero además de colapsarse el pulmón por la tristeza, se colapsa el hígado por la rabia contenida.

Las enfermedades del pulmón se manifiestan en patologías de las vías aéreas y también pueden ser relacionadas con la piel.

El corazón y la tensión excesiva

El corazón es maestro de la circulación sanguínea, del equilibrio psíquico.

Es un órgano que recibe la influencia directa del buen o mal funcionamiento de los otros órganos. Cuando la enfermedad de un órgano llega a afectar al corazón, quiere decir que la enfermedad lleva instalada cierto tiempo en el organismo y que el corazón debe mantener una tensión excesiva para seguir manteniendo el suministro de sangre suficiente. Por eso, una noticia sorpresa, aunque sea alegre, o emoción excesiva, puede herirlo de muerte.

El pericardio protege al corazón, y antes que la enfermedad ataque al corazón, atacará al pericardio. A nivel emocional, el pericardio también nos protege de las emociones más fuertes.

El triple calentador y el desequilibrio energético Yin Yang

El Triple Calentador es un meridiano de control, canalización de la energía excesiva y de desagüe de los líquidos. Antes de que un exceso de energía afecte letalmente al corazón o al pericardio, este meridiano derivará toda esa energía para reconducirla o refrigerarla.

Debemos pensar en el Triple Calentador cuando la enfermedad sea aguda o en un estado crónico postvírico. La enfermedad aguda que se presenta con mucho calor (fiebre) o frío o en estados carenciales, de defensas bajas o sintomatología postgripal.

A nivel emocional podemos pensar en estados de mucho nerviosismo, angustia, ansiedad, histeria; y en casos contrarios de abulia, cansancio, fatiga, y depresión.

Los puntos Ashi de dolor

Los puntos Ashi según la M.T.C. son puntos reflejos de dolor. Pueden estar sobre los meridianos o fuera de ellos. Pueden responder a patología orgánica, emocional, mecánica-estructural, traumática-reumática o climática.

Si los puntos Ashi aparecen en los pies o en las manos y brazos y no aparecen en la espalda, podemos asegurar que la enfermedad está en un nivel energético emocional y no orgánico.

Los puntos alarma de primer grado son los puntos Mo, Mu o Bo situados en la región frontal anterior de tórax y abdomen.

El lado izquierdo representa nuestra parte femenina y el derecho el masculino. Los puntos del pie del lado izquierdo suelen ser más dolorosos que en lado derecho. Podemos sospechar que los puntos del pie izquierdo corresponden más a lo emocional subconsciente y el pie derecho a lo mental consciente.

La respiración consciente

La respiración por la boca se llama respiración de fuego. Es respiración continua, sin pausa, inhalando por la boca y exhalando por la boca. Es una respiración emocional. Conecta directamente con las emociones del corazón, para aquellas personas que no pueden expresar sus sentimientos.

La respiración por la nariz nos conecta con el cerebro. Es una respiración mental, de control de las emociones. Puede relajarnos profundamente y conectar con las emociones excesivas.

Conclusión

El Shiatsu emocional a través de la respiración no busca solucionar el problema emocional, tan solo busca deshacerse de los puntos psicomatizados. Un punto de dolor es un punto de bloqueo de la energía y de la sangre.

Cuando el dolor y los puntos bloqueados van aumentando, la interrupción de la sangre será mayor y la posibilidad de que aparezca una enfermedad local o general será cada vez mayor. Al conseguir inhibir esos puntos conseguiremos un mayor bienestar. La emoción será más soportable y nuestra vida más equilibrada.

El Shiatsu emocional persigue en primer término la inhibición del dolor de los puntos Ashi. Pero en ocasiones se produce espontáneamente una conexión con los sentimientos y experiencias bloqueadas y la persona está en llantos, gritos, risas o lamentos. La respiración de fuego favorece esta conexión con las emociones.

El Shiatsu emocional trata con eficacia los trastornos de tipo psicosomático y su sintomatología. Está indicado en situaciones de estrés, ánimo decaído, miedos, ansiedad, preocupaciones excesivas, tensiones, pena, sentimientos de rabia y frustración, enfermedades de tipo crónico, obesidades idiopáticas o de origen psicoemocional, y en general todas aquellas enfermedades que se desconocen las causas o se intuye que tienen un origen emocional.

El Shiatsu emocional no sustituye la terapia psicológica o psiquiátrica convencional, la complementa.

Cuando nos equilibramos, empezaremos a sentir cosas diferentes y a tomar conciencia de cómo usamos los mecanismos energéticos para defendernos o adaptarnos, y así podremos decidir usarlos o no, aprendiendo sobre nosotros mismos y cómo nos relacionamos. Al desactivar dichos bloqueos, que son reflejos de nuestras resistencias, sentiremos que tenemos objetivamente más energía y vitalidad.

El shiatsu es un apoyo para aprender a conducir nuestra vida, para despertar nuestra sensibilidad. Así tendremos más recursos y más fuerzas para enfrentar los temas pendientes de una manera autónoma.

También ayudará cambiar hábitos o tomar determinadas decisiones más fácilmente, a terminar determinados ciclos vivenciales incompletos, y a encontrar un verdadero equilibrio que siempre es dinámico.

Fuentes:
Emilio Estivill – Shiatsu emocional
https://www.shiatsu-masunaga.es/shiatsu-y-emociones/